Con la Navidad a la vuelta de la esquina, las empresas ya organizan sus cenas de fin de año, buscando experiencias únicas y memorables para sus equipos. Te contamos las claves para entender lo que realmente buscan las compañías para hacer de su cena navideña un evento especial.
Cena de empresa Navidad.
La Navidad toca a la puerta, y con ella llega la época de las cenas de empresa. Aunque para algunos este plan pueda sonar aburrido o rutinario, lo cierto es que cada año más directivos buscan hacer de la cena navideña una ocasión especial, distinta y memorable.
La originalidad está en tendencia: hoy en día, las empresas se esfuerzan en innovar, organizando cenas que permitan a sus empleados bailar, reír, comer, y sobre todo, disfrutar de un día único en compañía de sus colegas. La cena de Navidad es uno de los eventos más esperados en el ámbito corporativo; representa un momento de celebración y refuerzo del espíritu de equipo, y por eso las empresas se esmeran cada vez más en su planificación.
Para los hosteleros y restauradores, este es un momento clave que implica un aumento de la carga de trabajo, pero también una gran oportunidad de negocio. En este artículo, exploramos las principales tendencias y factores clave que las empresas buscan al planear una cena navideña inolvidable.
Los empleados de la empresa quieren ser protagonistas de la noche y no tener que preocuparse de nada, pero también recibir una atención especial, más allá de una simple cena con “los del trabajo”. Hay que recordar que los compis de trabajo pasan muchos tiempo juntos, se crean vínculos de amistad, comen casi todos los días juntos, quedan cada viernes (o en nuestro caso, cada jueves) a un after office en la cocina, a jugar paddle o ‘al bar de abajo’.
También hay que pensar en aquellos que trabajan en remoto, los que viven en otras ciudades y países o los nuevos empleados que acaban de entrar. Este grupo es más tímido, por lo que, esta es la oportunidad de conocer mejor a sus compañeros, a los jefes, partners, fundadores y socios. ¡Vamos a ayudarles a que la experiencia sea más cómoda y amena!
Cada empresa es un mundo, no podemos ofrecer a la agencia creativa de marketing la misma experiencia que a la empresa de tecnología; o a un partido político, que busca discreción. Por ello, aconsejamos a los restauradores y hosteleros que designen a un encargado de las cenas de empresa. Esta persona es la responsable en hablar directamente con la representante de recursos humanos que organiza el evento y, quien da todos los detalles del perfil de empresa, la cantidad de personas, lo que están buscando y el presupuesto.
Una vez se tenga la información de lo que la empresa le gustaría para su cena de Navidad y por qué quiere trabajar con tu hotel, restaurante o local, le puedes hacer una oferta personalizada. Una empresa en la que el equipo es mayoritariamente joven quizás prefiera una celebración más simple, desenfrenada, con música. De lo contrario, una empresa con un equipo de ejecutivos con un gran presupuesto quiera una cena con lo mejor de lo mejor en cuanto a la calidad de comida y una velada más tranquila que acabe pronto.
Por eso, es importante que como restauradores y hosteleros tengan claro a qué tipo de perfil de empresa están ofreciendo una experiencia o qué flexibilidad tienen para adaptarse a cada requerimiento. Por lo general, es mejor definir unos perfiles de empresa que encajen con el establecimiento y hacer la campaña de marketing dirigida a ellos. ¿Cómo lo hacemos? con networking, contactando a la empresas directamente y potenciando la oferta en sus canales de comunicación.
A la hora de buscar un restaurante para organizar la cena de empresa, uno de los factores que suelen ser determinantes es la ubicación del local. Que sea accesible para todos los trabajadores es algo muy importante. Una buena comunicación de transportes es algo que siempre suma puntos a tu negocio.
Asimismo, las empresas suelen buscar espacios que sorprenden, como terrazas con vistas, edificios históricos o restaurantes de moda. Además, la accesibilidad es un factor clave: las empresas prefieren lugares céntricos y bien comunicados para facilitar la asistencia de todos los empleados.
Recomendamos hacer publicidad en los núcleos empresariales cercanos al local, ya que se entiende que el acceso de los trabajadores al local es bueno.
Si la ubicación es lejana, procura brindar algún medio de transporte para que todos puedan llegar sin problema. Igualmente, será un aliciente en caso de que quieran beber, pues, así, no tendrán que coger el coche después.
La comida es uno de los elementos más importantes de una cena de Navidad. Los organizadores se esfuerzan en encontrar opciones de menú que incluya platos para todos, desde opciones vegetarianas y veganas hasta platos sin gluten o sin alérgenos. Este tipo de flexibilidad es cada vez más demandada, y los restaurantes que ofrecen menús inclusivos suelen ser los favoritos.
Al tratarse de comidas que involucren a grandes grupos de personas, es fundamental organizar una logística interna que no retrase la salida de los platos para los de la cena de empresa y el resto de comensales. Si es necesario, plantea ampliar tu equipo de cocina, camareros y bartenders y así tener un equipo enfocado en la cena de empresa y el otro en los clientes habituales.
De este modo, puedes ofrecer un presupuesto tomando en cuenta todos los aspectos, desde la contratación de personal, los costes de cada plato, la compra de materia prima y la limpieza. No olvides que si estas celebraciones alargan la hora de cierre del local, debes dejar claro a la empresa la hora de cierre y dar un margen de tiempo para que no sientan que los “están corriendo” del lugar.
La selección del menú depende de muchos factores, en especial el presupuesto de la empresa. Eso sí, es normal que las empresas prefieran ahorrar el máximo de gasto posible en la comida, pero es la parte más importante para que los empleados se vayan a gusto de la celebración. Si se come bien, hablarán maravillas de la velada. Si la comida es lo que brille por su ausencia, será un fracaso tanto para el equipo de recursos humanos como para el restaurante. Así que, como restaurador y experto explica a la empresa que quiera “ahorrar” la importancia de ofrecer una buena comida a los empleados, pues es Navidad.
La privacidad es un aspecto valorado por muchas empresas, que prefieren espacios reservados o áreas privadas dentro del restaurante. Además, los servicios exclusivos, como personal dedicado, cócteles personalizados o música en vivo, son detalles que añaden valor y hacen que los empleados se sientan apreciados.
Si el local cuenta con áreas privadas, es una ventaja. De no ser así, una opción es dividir el espacio con paneles o biombos que ofrezcan cierta intimidad. Además, las mesas redondas pueden facilitar la interacción entre todos los miembros del equipo, especialmente si son grupos pequeños o departamentos específicos.
También si tienes el restaurante abierto a todo el público, que los comensales no se sientan abrumados por la mesa grande de la cena de empresa. Estos escenarios, cuando un cliente entra al restaurante y se percata que hay dos cenas de empresa, automáticamente piensan que el servicio será lento y estarán desbordados. Ahí la importancia de la logística interna para que ningún comensal sufra las consecuencias del full house.
Las empresas buscan actividades que fomenten la interacción entre los empleados y hagan el evento más dinámico. Entre las opciones más demandadas están los shows en vivo, concursos, photobooths, juegos de mesa y hasta actividades de team-building. Estas actividades ayudan a romper el hielo y permiten crear recuerdos memorables.
El restaurante puede ofrecer opciones de entretenimiento que se adapten a su espacio, o dejar un área reservada para que los propios empleados organicen sus actividades, como concursos o intercambios de regalos.
Por otra parte, los eventos de Navidad de las empresas suelen alargarse después de la tradicional cena y es común que un grupo más reducido quiera seguir la fiesta. Aquí la reserva privada ha terminado, pero es una oportunidad para retener a los clientes ofreciendo un espacio para cócteles, música o karaoke, si el local dispone de ello. De no ser así, se puede recomendar a otros bares o discotecas cercanas para que los empleados sigan disfrutando de la noche.
